Estamos nostálgicos y por ello no es de extrañar que aprovechemos estos días de otoño para recordar algunos árboles que han pasado por la Escuela, en los que replanteándose por completo la distribución de ramas, así como variando la inclinación y ángulo de plantado, se logra obtener una imagen totalmente radical de este Ullastre (Olea sylvestris). Conociendo los elementos de estética y poniéndolos a nuestro servicio (punto focal, compacidad, unidad, equilibrio dinámico, asimetrías, espacios vacíos…), conseguimos aportar carácter a este bonsái apodado «El Rino». Así quizá consigamos alcanzar la meta que todo bonsaista persigue y sólo logra en aquellos ejemplares sobresalientes, que en virtud de su naturaleza escondida tras mucho tesón y paciencia acaba dotándoles de alma.

Diseño de su anterior propietario.

Resultado tras dos Talleres en la Escuela.